martes, 16 de noviembre de 2010

Relato paranormal


Hablando de un paréntesis entre el conjunto de documentos e investigaciones con las que comencé a escribir aquí días atrás acerca de demonios monstruos y cosas extrañas , me surgió un recuerdo que tenía muy guardado desde hace muchos años, como sabrán mi mente racionalista se dedica someter toda esta clase de representaciones espirituales al racionalismo y sobre todo a reducirlas al estado de la explicación lógica, pero he aquí lo que sucedió hace ya aproximadamente 20 años.

Aquí la historia:

Hace ya tiempo cuando era apenas un niño y vivíamos en una casa cerca de una de las nuevas zonas de la ciudad de Morelia, recuerdo que por una cuestión escolar, no pudimos acompañar a mi padre en un largo viaje que llevó a cabo aproximadamente por 3 meses, siendo así; nos quedamos en la ciudad con mi madre.

Una noche durante una tormenta en donde ya había llovido agua, granizo y una vez mas agua, mi hermano mayor Guillermo dormía en un cuarto separado del mio, en el cual por alguna razón de espacio mis padres habían dejado una cama extra ( que era inicialmente de mi hermano Guillermo y que por haber comprado una mas grande para el se había quedado en mi habitación.) en la cual el ocasionalmente dormía cuando nos quedabamos jugando o platicando hasta tarde, sin embargo en aquel día nos habíamos dormido un poco tratando de esperar a mi padre el cual según comentarios de mamá llegaría por la tarde e iríamos todos a cenar hamburguesas al centro.

Mi padre no llegó durante el preludio de la tormenta y pues al ser tan fuerte de paso se fue la luz en la casa, mi mamá nos ordenó irnos a la cama, ya al día siguiente saludaríamos a papa y le preguntaríamos si había traído regalos.

aproximadamente a las 10 de la noche comenzó a arreciar el viento y las ráfagas hacían sonar las ventanas, junto con el ruido del granizo que caía sin cesar en el pequeño jardín que lindaba con mi enorme venta, yo para que mentir un poco asustado traté de seguir durmiendo hasta que escuché que abrían mi puerta con mucho sigilo, de un salto me puse en pie esperando ver algo horrible y me encontré con la cara asustada de mi hermano preguntándome si podía dormir en la misma habitación, a lo que asentí inmediatamente pensando dentro de mi que me serviría de compañía por la noche.

unas horas mas tarde cuando ya incluso la luz se había ido a causa del fuerte viento, estábamos platicando el por que de que papá no llegaba a casa y que si llegaba en ese momento seguramente estaría totalmente mojado y cansado; estábamos hablando de esto cuando por algún instinto natural o sobrenatural, ambos volteamos la mirada a la ventana que acababa de iluminarse con la luz de san Telmo ( un relámpago), encontrándonos con la sombra de una persona la cual hizo un ruido para llamar nuestra atención amén de mover los dedos de la mano llamándonos hacía el.

Pegar un grito de susto y comenzar a llorar de miedo, fue un solo gesto. por el ruido que hicimos y los saltos que dimos hacia el otro extremo del amplio cuarto, entro mi mama y mi papa ( si nunca supimos a que hora llegó) preguntándonos que había sucedido y que por que gritábamos de ese modo, yo me había quedado sin palabras, ( recuerdos de mi madre) y tuvieron que meterme al agua fría para que volviera en mi. lo primero que hice al recuperarme fue preguntarle a mi papa que era eso y que había pasado, el con el afán de calmarme me dijo que había sido el hablándonos para que le abriéramos la puerta por la lluvia, cosa que creí por mucho tiempo aunque aquí paso a enumerarles las razones por las que no pudo ser el y por que no fue algo normal.


1.- El tiempo que pasó de cuando vimos esta cosa en la ventana, al momento que entro mi papa por la puerta, no había sido mayor a 30 segundos, era imposible que hubiese entrado tan rápido del jardín a la casa y de allí a nuestra habitación.

2.- Cuando el entró, estaba completamente seco, a fuera había una verdadera tormenta, era imposible que hubiese estado seco o que por otra parte se hubiese secado tan rápido, además de estar ya enfundado en su bata de dormir.

3.-Qué haría el en el jardín si no necesitaba entrar allí para nada pues el tenía llaves de la casa obviamente.

4.- Cuando por fin pude tranquilizarme e irme a la cama después de darle las gracias por calmarme, noté que en su mesa de noche estaba la pistola que el tenía en casa para seguridad de la familia y que nunca bajo ningún motivo dejaba fuera de su escondite ( que nosotros sabíamos pero no tocábamos) y que por supuesto en una situación normal jamás hubiese dejado sobre la mesa con total desparpajo.

5.- Dormir en esa casa fue complicado para mi esa noche, por lo que a las primeras luces de la mañana y cuando ya había escampado me levante al escuchar ruidos de personas en el jardín, encontrando a mi papa a la búsqueda de huellas que por cierto nunca encontró.


Hace muchos años que esa casa pertenece a la familia, fue nuestro primer hogar en la señorial Morelia, y sin embargo ( aunque ahora pertenece a mi hermano) nunca he dejado de tenerle un poquito de respeto, en especial a esa habitación que a pesar de tantos años y tantas modificaciones, por alguna razón, esa habitación a logrado permanecer intacta.

Yo con el tiempo, los estudios y mi poca fe en dios, me convencí de que el suceso fue alguna tarugada impulsada por nuestro miedo congénito de niños, sin embargo mi hermano mayor nunca lo superó completamente, recuerdo que cuando el entró en sus años de adolescencia, se hizo muy afecto a amuletos y rezos, dormía con una biblia o una cosa así bajo la cama y padecía tremendamente de pesadillas, siempre fue el mas religioso y espiritual de los tres y sin embargo incluso ahora tiene problemas para dormir.


Esta historia se las cuento por que me pareció algo curioso y para ser sincero por que es la única situación paranormal ( sin incluir la cortina encantada de la casa del Pato) que he sufrido en mi vida o de la que por lo menos guardo recuerdos de como si hubiese sucedido ayer.



Saludos.