jueves, 7 de agosto de 2008

Salvatierras

El camino lo ve todo lo que pasa. Y el que vive en el camino sabe mucho.
Yo averiguo cada huella, cada casa, cada bestia, cada muerte.
Eso sí, por nada Platico lo que encuentro.
Es de mucho peligro.
Capaz quedo en algún roble Igual que un judas, pa’ alegración de los zopilotes.
El Martín Tzotzoc tuvo mala suerte.
¡Si no va a ser mala suerte irse a topar con un trabajo de los Salvatierra! Todo lo vio.
Desde que se lo pusieron al toro la gaza, hasta que se lo fueron llevando jalandito.
Luego, el Encarnación Salvatierra regresó para borrar las señas, y allí se lo encontró.
El Martín dijo que no iba a decir nada pero el Encarnación no muy le quiso hacer caso,
¡No más se lo pepenó del pescuezo y se lo llevó pa’l roble!
Allí lo encontraron columpiándose, con un mosquero que ni dejaba echar la bendición siquiera. Mala suerte del Martín Tzotzoc.
Yo desde ese ínter, me hice la obligación de no decir nada.


Del libro de Benzulul. Chiapas y sus leyendas.